Ecotrackers en Galápagos

Ecotrackers está en Galapagos para desarrollar el corredor de Galapagos al Río Amazonas y una galeria suterranea en las llamadas "cuevas del Amor" de interpretación de la armonía del hombre con la naturaleza en la Isla Santa Cruz. (Ecotrackers is in the Galapagos to understand the corridor from the Galapagos to the Amazon River, and to create a subterranean gallery called ¨Caves of Love.¨ We hope to interpret harmoney between man and nature on the island of Santa Cruz.)

Tuesday, April 03, 2007

El deterioro en Galápagos

Todavía podemos frenar el deterioro de Galápagos"

Gunter Reck K. PHD en Ciencias Marinas

La Unesco asegura que el Patrimonio Natural de Galápagos está en peligro, ¿tiene sustento esa afirmación?

Hay confusión sobre patrimonio en peligro. Primero hay que saber que Ecuador asumió voluntariamente el compromiso de conservación. No es impuesto por la Unesco, sino que se solicitó incluir a Galápagos dentro del inventario patrimonial.

¿Pero qué aspectos ha considerado la Unesco?

Los diferentes miembros de la comisión son los que evaluaron a Galápagos y su conclusión es que afronta serios problemas.

¿Por qué razón
está aquí?
Su trayectoria.
Es biólogo marino e investigador, oriundo de Alemania. Llegó a Galápagos como guía de turismo, luego se involucró a la Subsecretaria de Pesca, Ingala, Ong. Desde hace 17 años es profesor universitario.
Su punto de vista. A pesar de ser único por sus especies, en el archipiélago no existe un desarrollo sostenible.

¿Qué problemas detectó esa comisión?

La falta de gobernabilidad, que pone en riesgo el futuro de la conservación. Además, los conflictos de intereses nacionales frente a objetivos locales que priorizan al desarrollo social y económico. Tampoco hay una agenda común para la conservación. Falta capacidad de manejo político.

En este caso, ¿de quién es la responsabilidad?

Es de todos. Conservar este patrimonio es un asunto del Estado, sobre todo porque el 97 por ciento del archipiélago es considerado Parque Nacional. Pero al ser una provincia tiene un Consejo Provincial y tres municipios que reclaman sus derechos de autonomía, con una agenda no compatible con los fines de conservación.

¿Quién debe asumir la tarea de controlar esa situación?

Foto: EL COMERCIO


Se decidió que el Ingala rija el destino de Galápagos, pero me da la idea de que ya no se lo fortalece. Hay que decidir qué es lo más importante frente a la responsabilidad de proteger el Parque Nacional y la Reserva Marina.

La Unesco señala que Galápagos sigue los mismos pasos de las islas Canarias.

Las Canarias tienen 300 000 habitantes y ya solo les queda una pequeña parte de su fauna y flora originales. Galápagos está por los 30 000, aunque cuando llegué en 1973 eran 3 000. Pero si la tendencia de crecimiento poblacional está sobre el seis por ciento, pronto serán 50 000 habitantes. A largo plazo, eso es una bomba de tiempo, ya que las presiones por conseguir recursos aumentarán.

¿Será que Ecuador no estuvo lo suficientemente preparado para proteger las islas?

Quizás al principio no se pensó en dar mucho poder a los gobiernos seccionales y ahora hay un problema de gobernabilidad. Pienso que Ecuador sí está capacitado para manejar Galápagos: declaró el 97 por ciento del territorio como Parque y aún es respetado. Con apoyo internacional mantiene varios trabajos de conservación. Por eso la comisión ha dudado por varios años incluir a las islas en la lista de riesgo.

¿Pero qué le llevó a realizar tres advertencias?

Desde hace una década se desatendió el crecimiento exagerado del turismo por dar demasiado énfasis a los problemas pesqueros. Ahora, se pretende imponer nuevas modalidades de turismo como la pesca deportiva. Eso nada tiene que ver con el atractivo original de Galápagos como la observación de la naturaleza. Esto está saliendo de control y el Gobierno no puede frenarlo.

¿Aún se respeta esa superficie como reserva?

Sí, al crear la Ley del Ingala se estableció que el dos por ciento de la superficie de las islas habitadas estará disponible para obras de desarrollo. En eso se basan ahora los municipios de Santa Cruz, Isabela y San Cristóbal, en su intento por levantar más construcciones.

¿En esta situación cuánto se afecta a la fauna y flora?

Han sufrido desde que la gente llegó en el siglo XIX y trajo sus especies domésticas y ocupó varias áreas. Si en los años 60 llegaba un barco de abastecimiento cada tres meses, ahora hay uno o dos por semana con más especies invasoras.

¿Qué zonas han sentido más los impactos?

Las islas grandes tienen más niveles de conservación y han contribuido a la evolución de las especies. Isabel, por ejemplo, tiene el 40 por ciento de todas las plantas de Galápagos y una gran parte de animales. Las partes altas húmedas son las más afectadas; allí crecen especies extrañas como la cascarilla, guayaba, maracuyá...

¿Y los daños a las especies?

Aún se desconoce qué efectos sufrirán las plantas nativas, los garrapateros, el pinzón de mangle que están en serio peligro. Ya ha desaparecido el pájaro brujo de la isla San Cristóbal.

¿Es irreversible o todavía hay cómo remediar?

Estamos a tiempo de impedir el deterioro de lo mucho que queda. Por ejemplo, con los programas de cautiverio se logró revertir la desaparición de la tortuga de la isla Española. Pero los progresos en la conservación no avanzan a la misma velocidad de los problemas.

¿Qué pasos concretos servirán para evitar el deterioro?

A largo plazo, aparte de la decisión política, es fundamental mejorar el nivel de educación de los galapagueños para que puedan trabajar en las diferentes actividades. Hay que seguir apoyando a los proyectos de conservación.

¿Cuáles serán las consecuencias si Galápagos pasa a patrimonio en peligro?

Es una alerta sobre un problema que Ecuador debe resolver. También es un llamado a los países y Ong de que no han hecho lo suficiente y que deben reforzar su apoyo. Significa también abrir fondos de emergencia. No se trata de una vergüenza, sino reconocer que existen problemas graves por solucionar.

0 Comments:

Post a Comment

<< Home